Un directo que es declaración de intenciones. Rocío Saiz fusiona pop electrónico, cuerpo y palabra en un espectáculo que desborda verdad, deseo y rebeldía. Cada canción es un himno queer, cada gesto, una ruptura. Provocadora, luminosa y sin filtros, Rocío Saíz convierte el escenario en un lugar de libertad compartida.
Una experiencia escénica tan política como poética.